ARTE
Un Dalí hasta ahora desconocido asoma la cabeza
Una obra atribuida a Salvador Dalí, autentificada recientemente por Nicolas Descharnes, hijo del secretario del artista surrealista, acaba de reaparecer en la galería de Nueva York Heather James Fine Art.
Estos días, los especialistas en Dalí muestran, bajo cita previa, este lienzo ejecutado en 1932, el cual ha estado en manos privadas durante 75 años.
Su historia recuerda a algunas de las advertencias que hizo el provocador pintor sobre sus trabajos, y en concreto sus circunstancias traen de nuevo al presente los juegos dalinianos con el público, la crítica y los coleccionistas.
En concreto, lleva impregnadas las palabras de Dalí de que "para descifrar algunas de mis obras, se necesitarán al menos un siglo". En este caso, resalta que la obra no tiene título. Por ello, se hace muy difícil buscar su documentación.
De momento, la Fundación Gala Salvador Dalí no ha incluido esta pieza en su catálogo. Pero, sí se ha registrado en el archivo de Dalí de Descharnes, cuyo padre fue un fotógrafo francés, cineasta y autor, que trabajó como secretario de Dalí, ya mencionado anteriormente.
A la muerte del artista, Descharnes se convirtió en administrador de sus derechos de autor. Y ahora su hijo colabora con diferentes casas de subastas para certificar la autoría de las posibles obras de este autor. "Cuando es una falsificación, siempre se ve algún error. Aquí no hay", indicó Descharnes hijo, el cual ayudó a autentificar el primer trabajo surrealista de Dalí, El nacimiento intrauterino (1921) en 2014.
La pintura, que se enseña estos días en Nueva York, está firmada como "Gala Salvador Dalí", la manera del artista de rendir homenaje a su esposa, una gran influencia en su vida. Además, el trabajo contiene dos motivos recurrentes que solía utilizar en 1932: una ventana que se abre al interior, y un mástil que sobresale.
A esto, se añade que los pigmentos y materiales utilizados también corresponden a los empleados durante este período. Más que suficiente para la galería, caracterizada por ofrecer un mirada distinta al pasado y presente del arte a través de artistas impresionistas, modernos, posguerra y contemporáneos.
Ya han empezado a enseñar la pieza a sus clientes, aunque prefieren no desvelar el precio por el que han ofrecido dicho trabajo. Dalí siempre se suele incluir al final de las subastas en Nueva York de Christie's y Sotheby's en las veladas de arte impresionista y moderno, como las que se celebrarán en mayo y noviembre. Crea mucho interés en parte por su estancia en Manhattan.
Su obra La persistencia de la memoria se convirtió en una sensación de la noche a la mañana en su primera exposición en Nueva York, precisamente en 1932. Sin embargo, fue en Londres en 2001, donde Dalí logró su récord en venta pública con Retrato de Paul Éluard (1929) al cambiar de manos por 12,48 millones de libras (21,74 millones dólares).
Ahora Descharnes trabaja en descifrar en qué exposiciones fue vista la pieza, que autentificó tras un proceso de investigación de nueve meses. Parece que se incluyó en uno de los dos exhibiciones que tuvo el artista en 1932 en la Galerie Pierre Colle en París, donde los archivos muestran que seleccionó trabajos sin título.